Ventajas y desventajas de ser entrenador personal

Las ventajas y desventajas de ser entrenador personal es algo que toda persona que se esté planteando formarse en esta profesión debería conocer.

Como ocurre con cualquier trabajo, el hecho de ser entrenador personal va a contar con una serie de ventajas o pros, y de desventajas o contras.

Conocerlas nos hará ver la realidad de esta profesión que se encuentra en un momento muy bueno, tanto a nivel laboral como de popularidad a la hora de optar por ella al formarse laboralmente.

En este artículo vamos a ver los pros y contras de ser entrenador personal, y qué podemos hacer para minimizar las desventajas de esta profesión.

Debemos destacar que hay que diferenciar entre dos tipos de entrenadores personales:

• Aquellos que trabajan por cuenta propia.
• Aquellos que trabajan por cuenta ajena contratados en un gimnasio o centro deportivo.

En adelante nos vamos a referir, en general, al primer caso; aunque cuando sea necesario haremos referencia al segundo caso a la hora de hablar de una ventaja o de una desventaja.

¿Qué es ser entrenador personal?

Ser entrenador personal supone convertirse en una figura profesional que se encarga de entrenar a una persona de forma individual y personalizada, atendiendo a todos los aspectos que ello conlleva.

Para ello, el entrenador personal debe conocer cada detalle de la persona que va a recibir sus servicios, y esto supone lo siguiente:

• Conocer el objetivo que desea alcanzar el cliente, y por el cual ha recurrido a sus servicios.
• Conocer la dieta que sigue el cliente, y ajustarla para permitirle alcanzar el objetivo establecido.
• Conocer sus hábitos diarios, como el tipo de trabajo que realiza, las horas que duerme, su disponibilidad horaria para entrenar...
• Conocer su estado emocional para saber si se encuentra animado, si realmente cree que puede llegar a alcanzar ese objetivo, si se desmotiva con facilidad, si tiene fuerza de voluntad…
• Conocer su estado físico, si realiza o no deporte regularmente, si ha llevado una vida sedentaria, si practica otros deportes, si se ha lesionado alguna vez o es propenso a ello, si padece algún tipo de patología...

¿Qué hace un entrenador personal?

Cuando el entrenador personal conoce todos los datos anteriores, será cuando empiece a desarrollar plenamente su trabajo, el cual consiste en:

• Indicar un plan de entrenamiento adaptado al estado físico del cliente y al objetivo que desea alcanzar.
• Indicar pautas sobre la dieta que realiza el cliente para poder alcanzar el objetivo planteado.
• Sugerir una rutina diaria que deberá seguir el cliente para poder favorecer al organismo alcanzar ese objetivo, en lo que respecta a horas de sueño, hora a la cual se debe comer, compatibilidad entre la práctica de diferentes deportes…
• Supervisar el entrenamiento del cliente, controlando que realiza los ejercicios de la forma adecuada, explicando su ejecución, y ayudando en los momentos en los que lo requiera.
• Servir de apoyo psicológico durante el entrenamiento, motivando al cliente cuando tiene dificultades para realizar el ejercicio indicado.
• Ser una figura de autoridad ante su cliente, ayudándole a que realice el trabajo que se ha indicado, siendo estricto cuando se requiere, pero sin llegar a ser excesivamente autoritario.

Ventajas de ser entrenador personal

Las ventajas de ser entrenador personal son muy numerosas, y es por ello que muchas personas optar por realizar un curso que permita ejercer esta profesión.

De entre todas estas ventajas vamos a destacar las siguientes:

Horario flexible

Contar con un horario flexible es una ventaja de ser entrenador personal. Esto es algo que se valora mucho hoy en día, donde a todos nos faltan horas para hacer lo que queremos, o cuadrar los horarios con otras actividades.

El entrenador personal que trabaja por cuenta propia cuenta con flexibilidad horaria al poder decidir las horas de entrenamiento de sus clientes, siempre y cuando la disponibilidad de ambos coincida.

Posibilidad de aumentar los ingresos

Esta es una de las ventajas de ser entrenador personal que más interesa a quién opta por esta profesión.

¿Qué quiere decir esto? El entrenador personal que trabaja por cuenta propia tiene la capacidad de mejorar sus ingresos realizando todo tipo de actividades relacionadas con esta profesión.

Debemos saber que el trabajo de entrenador personal no solo se limita a entrenar a personas que desean ganar masa muscular o perder peso, sino que va mucho más allá.

Desde el entrenamiento de personas que padecen alguna patología o enfermedad, hasta el entrenamiento de niños o de mujeres embarazadas, son algunos ejemplos por los que puede optar un entrenador personal con la formación adecuada.

Además, tanto los entrenadores que trabajan por cuenta propia, como los que se encuentran contratados en un gimnasio, pueden optar por realizar algo que está muy de moda, y que es tendencia creciente: los entrenamientos online.

Realizar entrenamientos online para un entrenador personal supone el poder aumentar sus ingresos, gracias a prestar servicios a personas que se encuentran fuera de su ámbito geográfico.

Como decimos, se trata de una tendencia al alza, y que está dando muy buenos resultados; tanto desde la perspectiva del cliente, como desde el punto de vista del entrenador personal.

Ser nuestro propio jefe

Otra ventaja de ser entrenador personal muy apreciada, es el hecho de no contar con un jefe que nos diga lo que tenemos que hacer.

Ser entrenador personal es contar con nuestro propio negocio, en el cual el valor somos nosotros mismos o mismas.

Una persona formada en entrenamiento personal cuenta con una capacidad ilimitada de poder orientar su trabajo hacia donde quiera, dentro de este amplio ámbito que es el ejercicio físico y el fitness.

Seremos un referente para todos nuestros clientes

Como entrenadores personales, vamos a contar con la ventaja de ser el espejo en el que van a mirar la mayoría de nuestros clientes.

Esto conlleva, también, el tener la obligación de guardar las apariencias delante de ellos, manteniendo siempre una actitud positiva, amable, y que haga referencia en todo momento a un estilo de vida saludable.

Esto es algo muy importante, ya que ser un referente para un cliente le motivará aún más a alcanzar su objetivo o deseo, y esto nos facilitará el trabajo como entrenadores, además de hacer que nos sintamos realizados como profesionales.

Realizar un trabajo entretenido y libre de monotonía

Otra de las principales ventajas de ser entrenador personal es que, al trabajar en todo momento con clientes, cada hora de nuestro trabajo será diferente.

Como habremos oído, cada persona es un mundo, por lo que el hecho de trabajar con diferentes clientes a lo largo de un día, y pasar tiempo con ellos, nos ofrecerá momentos de conversación y experiencias únicas.

Esto es algo de mucho valor, ya que poder trabajar estando entretenidos y conociendo gente es algo que no se puede obtener en muchas profesiones.

Ser una empresa sin necesidad de contar con un local o recinto

Si nos decidimos a montar una tienda o empresa, en la mayoría de los casos necesitaremos contar con un local o con una nave o almacén.

Sin embargo, ¿el entrenador personal no necesita un gimnasio? Sí y no. Vamos a explicar esto.

Algo muy habitual es que un entrenador personal que desarrolla su actividad en un gimnasio por cuenta propia, cuente con el visto bueno del mismo por el siguiente motivo:

El entrenador no paga una cuota, pese a que use la maquinaria y material de entrenamiento, pero a cambio aporta un flujo de clientes al gimnasio.

Se trata de un doble favor, ya que el entrenador puede desarrollar su trabajo, y el gimnasio obtiene la cuota mensual de los clientes del entrenador.

Otro caso es el de los entrenadores personales online, los cuales no necesitan ni un lugar para entrenar, ni material para sus clientes.

Esto supone una gran ventaja en lo que a inversión se refiere de cara a desarrollar el trabajo de entrenador personal.

Desventajas de ser entrenador personal

Veamos ahora las desventajas de ser entrenador personal, que suponen la otra cara de la moneda de ejercer esta profesión.

Cualquier profesión en la que pensemos tiene sus contras, y ser entrenador personal no se libra de ello.

Sin embargo, y como vamos a poder ver, estas desventajas no van a suponer ningún impedimento para que cualquier persona que desee trabajar de lo que le apasiona cumpla su sueño.

Estas desventajas son las siguientes:

Posible necesidad de adquirir material para entrenamiento

Para realizar los ejercicios que un entrenador personal indica, es posible que se necesite material o equipamiento.

Para los entrenadores que desarrollan su actividad en un gimnasio, esto no puede no suponer un problema al contar el propio gimnasio con gran parte del material y maquinaria a utilizar.

Sin embargo, este no va a ser el caso de los entrenadores personales a domicilio o que entrenen a sus clientes en exteriores.

El material para entrenador personal es muy variado, y la inversión en el mismo puede ser desde unas pocas decenas de euros, hasta una cantidad más importante.

En cualquier caso, debemos tener claro que una inversión bien pensada en material para entrenamiento mejorará la experiencia del cliente y las posibilidades de entrenamiento, lo que se traducirá en mayores ingresos gracias a la captación de nuevos clientes.

Comenzar con pocos ingresos

Esta desventaja de ser entrenador personal es algo que ocurre a la hora de empezar cualquier negocio.

Para poder contar con buenos ingresos es necesario formar una cartera de clientes amplia, de forma que mes a mes obtengamos una cantidad que nos permita cubrir gastos, tanto laborales como personales, y además ahorrar algo de dinero.

En este punto debemos hacer mención a dos aspectos:

• El primero, la necesidad de diferenciarse del resto de entrenadores personales ofreciendo algo diferente, o algo específico.
• El segundo, la necesidad de establecer una estrategia de marketing con la cual saber a qué tipo de cliente dirigirse y cómo hacerlo.

Un entrenador personal que ofrece lo mismo que los 500 entrenadores personales más que hay en su ciudad, probablemente pase desapercibido para buena parte de los clientes, y ello le llevará rebajar su cuota para poder captar clientes.

Sin embargo, un entrenador personal que ofrece algo que muy pocos entrenadores más pueden ofrecer, cuenta con gran valor de cara a ese cliente que busca exactamente eso. Con ello, puede ofrecer sus servicios a un precio rentable de cara al propio entrenador.

¿Qué quiere decir esto? Que todo entrenador personal debe encontrar su nicho de mercado. Esto supone dirigir su trabajo a un tipo de cliente específico, y no a nivel general. Algunos ejemplos son:

• Ser un especialista en halterofilia.
• Ser un especialista en la preparación de deportes empleando el HIIT.
• Especializarse en entrenamiento para la mujer.
• Especializarse en el entrenamiento para personas de la tercera edad.

El otro aspecto hace referencia al hecho de saber dirigir nuestras campañas de marketing a los clientes adecuados y, sobre todo cómo hacerlo y a través de qué medios.

Todos y todas coincidiremos que las redes sociales son, a día de hoy, un potente altavoz para llegar a personas de cualquier parte del mundo.

Por ello, conocer estrategias de venta para profesionales del fitness en las redes sociales, va a ser algo fundamental para cualquier entrenador que quiera aumentar sus ingresos.

En ocasiones, el trabajo con ciertos clientes no es gratificante

Con esta desventaja de ser entrenador personal queremos decir que, si bien antes hemos hablado de que trabajar con clientes hace el trabajo ameno; en algunas ocasiones esto no se va a cumplir.

Algunas personas creen que el entrenador personal va a ser el único y principal responsable de los cambios que se produzcan en su cuerpo e imagen, y en el caso de no obtener lo que esperan en el tiempo que quieren, lo pagarán con él.

El cliente es la persona que tiene la llave de alcanzar sus objetivos, siguiendo lo que el entrenador personal le dicta.

Esto es algo que un entrenador personal debe hacer ver a sus clientes, y es que él o ella únicamente les enseña el camino y les acompaña durante el momento que pasan juntos en el entrenamiento.

Otro caso es el de los clientes que acuden a un entrenador personal con ideas erróneas en la cabeza, o los famosos mitos que aún a día de hoy perduran de boca en boca, y que hacen que dicha persona vea con malos ojos las indicaciones del entrenador.

Hablamos de personas que creen que la grasa se convierte en músculo, que comer un poco más de proteína les va a destrozar el hígado, que forrarse la barriga con film transparente ayuda a perder grasa localizada...

El entrenador es el que posee los conocimientos necesarios para llevar a cabo un entrenamiento de manera adecuada, y debe hacer ver al cliente, mediante datos y experiencias, que esa es el camino a seguir.

Los ingresos mensuales pueden ser variables

Una desventaja de ser entrenador personal está relacionada con la variabilidad de los ingresos que recibe cada mes.

Esto se debe a que un sector de la clientela de un entrenador personal es, lo que podemos llamar, fugaz, y se corresponde con el tipo de cliente sin experiencia deportiva que quiere alcanzar el cuerpo perfecto en poco tiempo.

Estas personas, pese al trabajo y motivación de los entrenadores personales, abandonan la práctica deportiva al ver que en un mes no han conseguido lo que querían.

Por ello, es importante dar una visión y unos plazos realistas a nuestros clientes, para que sepan el tiempo aproximando que les va a llevar alcanzar su objetivo; y por supuesto, saber mantener la motivación en ellos para evitar el abandono.

No trabajaremos todas las horas en jornada continua

Antes hemos hablado de que un entrenador personal cuenta con horario flexible, ya que es él mismo en acuerdo con los clientes, el que marca sus horas de trabajo.

Sin embargo, también debemos saber que, dentro de esta libertad, nos vamos a encontrar con que la mayoría de nuestros clientes van a tener disponibilidad para entrenar fuera del horario laboral normal.

Esto supone contar con el mayor grueso de clientes entre las 6 y las 8 de la mañana, y entre las 17 y las 22 horas de la tarde, con el añadido de las personas que pueden entrenar de 9 a 17 de la tarde.

Por lo tanto, debemos ser conscientes de que la jornada de un entrenador personal no transcurre de manera continua, y que vamos a contar con horas libres a lo largo de todo el día.

En cualquier caso, y como también hemos dicho antes, el trabajo de entrenador personal es muy entretenido, y consiste en hacer lo que a una persona le apasiona; por lo que este factor no va a pesar tanto como en otro tipo de trabajo.

Como podemos ver, las desventajas de ser entrenador personal no son algo que nos pueda impedir trabajar de aquello que nos apasiona y nos hace sentir realizados.

Como en todos los negocios, los inicios siempre van a ser algo difíciles, pero conociendo las pautas adecuadas para seguir el buen camino, iremos contando con una cartera de clientes notable que nos permitirá empezar a manejar y enfocar nuestra carrera laboral hacia el éxito.

Si lo que quieres es ser entrenador personal, y que tu trabajo sea hacer aquello que más te gusta, no lo dudes y fórmate en esta profesión que se encuentra en pleno auge.