Abrir un centro de yoga es una opción por la que optan muchas personas que han finalizado una formación sobre monitor de yoga, y que buscan trabajar bajo sus propias normas y criterios.
Se trata de un camino que requiere trabajo y esfuerzo, pero que va a terminar proporcionando beneficios muy satisfactorios.
Para abrir un centro de yoga es necesario cumplir con una serie de requisitos y trámites, además de estar habilitados para poder impartir clases de esta disciplina.
En este artículo vamos a ver cuáles son los requisitos para abrir un centro de yoga en España, de forma que podamos ver los pasos y recomendaciones a seguir al iniciar nuestro camino como monitores de yoga autónomos.
Formación de monitor de yoga para poder trabajar
El primer requisito para abrir un centro de yoga en España es contar con una titulación que nos permita ejercer como monitores de yoga.
Actualmente es necesario en la mayoría de las comunidades autónomas realizar un proceso de acreditación de competencias al haber finalizado una formación no reglada sobre yoga.
Para realizar este proceso es necesario que la formación cumpla con una serie de requisitos, de forma que permita afrontar con garantías la acreditación de competencias.
Puesto que se trata de un punto de gran importancia, en este artículo te hablamos de manera muy extensa sobre este proceso.
Si queremos trabajar en el mundo del yoga, la necesidad de una buena formación es algo casi obligatorio para aquellos que desean ser autónomos.
Una vez hemos abierto un centro de yoga, los clientes buscan instructores cualificados que puedan guiarlos en su viaje a través de esta disciplina.
Una formación reconocida no solo atraerá a más estudiantes, sino que también permitirá contar con una reputación más fuerte en la comunidad del yoga.
Darse de alta como autónomo
Si queremos abrir un centro de yoga, el primer paso tras la formación es darse de alta como autónomos, lo cual nos permite abrir cualquier negocio.
En este caso es importante saber que este paso es necesario tanto en el caso de que vayamos a ser únicamente los gestores del local, como en el caso de que seamos gestores y además profesores.
En ambos casos deberemos figurar en la Seguridad Social como autónomos para luego poder registrar también el negocio a nuestro nombre.
Para más información sobre este punto, podemos consultar este enlace que nos lleva a la página de la seguridad social, donde nos explica los pasos a seguir.
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Tipos de yoga a impartir en nuestro centro
Cuando queremos abrir un centro de yoga, otro punto importante es establecer los tipos de yoga que vamos a querer ofrecer.
Si únicamente vamos a ser nosotros los profesores, esto dependerá de nuestra formación y conocimientos.
Por ejemplo, podemos estar formados en las siguientes modalidades de yoga y establecer unos horarios de clase para cada uno de ellos:
- Hatha yoga, que es yoga más extendido en todo occidente.
- Yoga para el embarazo y el post-parto.
- Yin yoga.
- Yoga aéreo.
El hecho de ofrecer diferentes tipos de yoga en nuestro centro, va a permitir que podamos abrir el abanico de potenciales clientes y, con ello, obtener un mayor beneficio y rentabilidad de nuestro negocio.
Es más, en muchos centros de yoga también se imparten clases de Pilates, por lo que si además de estar formados como monitores de yoga, lo estamos también en instrucción de Pilates, podremos abrir un centro con una gran capacidad de crecimiento.
Por lo tanto, para poder tener un número mayor de clientes es recomendable ofrecer distintos tipos de actividades, y también clases y talleres de temas como la meditación, los chakras, masaje ayurvédico o los pranayamas.
Crear un plan de negocios para el centro de yoga
Si vamos a abrir un centro de yoga, contar con un plan de negocios adecuado es algo obligatorio si no queremos fracasar en el intento.
El plan de negocios supone la hoja de ruta de un negocio, además de dar una visión clara de cómo el centro de yoga se destacará en el mercado, cómo atraerá clientes y cómo conseguirá ser rentable.
Una parte fundamental del plan de negocios es la Propuesta Única de Venta (PUV).
Esto es lo que diferenciará a nuestro centro de yoga de la competencia, y resalta por qué los clientes deberían elegir nuestro centro frente a otros.
La PUV puede destacar el que contemos con un enfoque específico en un estilo de yoga, la instrucción personalizada en sesiones individuales o de grupos reducidos, horarios flexibles o cualquier otro aspecto que haga que nuestro centro sea único.
La PUV debe ser clara y tiene que hacer ver los beneficios que los clientes potenciales obtendrán al escoger nuestro centro.
En el plan de negocios del centro de yoga que queremos abrir, también hay que incluir las estrategias de marketing, donde definiremos cómo queremos promocionar y dar a conocer el centro de yoga.
Tácticas como el marketing en redes sociales, la aparición en eventos de nuestra localidad, la colaboración con influencers o la creación de contenido en internet son algunas ideas.
No podemos olvidar el apartado económico.
Debemos tener presentes los costes iniciales como el alquiler o compra del local, posibles reformas, la decoración del centro de yoga, los salarios si vamos a contratar a más profesores, el material, la publicidad...
Por lo tanto, en el plan de negocios del centro de yoga que queremos abrir debemos incluir:
- Descripción del concepto de nuestro centro de yoga.
- El mercado objetivo en base a tipos de clientes, edades...
- Tipos de clases que se va a ofrecer y sus precios.
- Información financiera sobre alquiler del local, coste del material, empleados...
- Capital con el que contamos y capital a pedir en préstamo.
- Estrategias de publicidad para promocionarnos.
- Posibles competidores y cómo pueden afectar al centro de yoga.
Presupuesto para abrir un centro de yoga
Abrir un centro de yoga va requerir, como en cualquier negocio, contar con una cantidad de dinero inicial con el que poder abrir y mantenerse hasta obtener beneficios.
Por lo tanto, va a ser necesario hacer un presupuesto para calcular de manera acertada cuánto capital vamos a requerir, y si debemos pedir un préstamo.
En este presupuesto se ha de incluir todos los gastos que tengamos antes de abrir el centro de yoga, siendo recomendable alargarlo al menos hasta los seis meses de haber abierto.
A modo de guía, cuando queremos abrir un centro de yoga deberemos tener en cuenta:
- Alquiler o compra del local para el centro de yoga.
- Gastos de apertura de tu negocio relacionados con licencias de actividad, registro en Hacienda, cuota de autónomo...).
- Reformas que se deba hacer.
- Muebles y decoración para el centro.
- Material de yoga necesario.
- Salarios de posibles empleados.
- Electricidad, calefacción, limpieza...
- Publicidad y promoción.
- Seguro del negocio, de los empleados, y de los alumnos.
Conocer a los clientes potenciales del centro de yoga
Al abrir un centro de yoga, saber quiénes serán nuestros clientes va a ser necesario para poder enfocar la oferta de actividades y la publicidad.
Un ejemplo es el siguiente:
Abrimos un centro de yoga en un pueblo de 1000 habitantes donde la mayoría son personas mayores. ¿Qué conviene más, poner más oferta de yoga para la tercera edad, o de yoga para el embarazo y post-parto?
En este caso que interesa más, ¿hacer publicidad en Instagram y Tik Tok, o dejar publicidad en los buzones?
Estos datos son necesarios porque nos ayudarán a conocer cosas para guiar a nuestro centro de yoga.
Tener un buen local para abrir el centro de yoga
El local va a ser un factor de mucha importancia a la hora de abrir un centro de yoga, debiendo fijarnos en aspectos como los siguientes:
- La ubicación, ya que si se encuentra en una zona concurrida seremos más visibles que si estamos en zonas apartadas.
- El espacio, especialmente si queremos impartir varias clases a la vez, ya que deberemos contar con varias salas.
- La iluminación, ya que para actividades como el yoga, el hecho de contar con buena iluminación natural va a favorecer la práctica.
- No olvidemos que debe haber aseos y ser accesible para personas con problemas de movilidad, algo que queda indicado en las normas que deben cumplir los establecimientos deportivos y gimnasios.
- Que sea fácil llegar hasta el local, especialmente a través de transporte público y con zonas de parking cerca.
Tramitar licencias y permisos para abrir un centro de yoga
El siguiente paso para abrir nuestro centro de yoga, una vez que esté registrado, será el de tramitar la licencia de actividad y permisos para poder abrir al público y ofrecer nuestros servicios.
Para abrir un centro de yoga deberemos tener en cuenta las siguientes licencias y permisos:
- Licencia de Actividad
Por lo general, se requerirá una licencia de actividad para establecer un negocio comercial, incluido un centro de yoga. Esta licencia garantiza que tu negocio cumple con las regulaciones locales y se ajusta al tipo de actividad que estás llevando a cabo. - Licencia de Obras
Si se necesita realizar reformas en el local para adaptarlo a las necesidades de un centro de yoga, vamos a necesitar una licencia de obras. - Licencia Sanitaria
Los centros de bienestar y salud, como los centros de yoga, requieren una licencia sanitaria para garantizar que las instalaciones sean higiénicas y seguras para los clientes. - Certificación de Conformidad
Algunos municipios pueden requerir una certificación de conformidad que confirme que el centro cumple con las normativas vigentes. Esto puede incluir aspectos como seguridad contra incendios y accesibilidad para personas con discapacidad. - Registro Empresarial
Deberemos registrar el negocio en el Registro Mercantil o en el registro correspondiente según la estructura legal que hayamos elegido (autónomo, sociedad limitada...) - Seguro de responsabilidad civil
Como veremos más adelante, es importante considerar contratar un seguro de responsabilidad civil que cubra posibles lesiones o daños a los clientes durante las clases. - Permiso de uso de suelo
En algunos casos, especialmente si el centro de yoga se encuentra en una zona residencial, puede ser necesario un permiso de uso de suelo para actividades comerciales. - Trámites fiscales
Deberemos registrarnos en Hacienda y cumplir con las obligaciones fiscales correspondientes para el tipo de negocio. Hasta que estos trámites y licencias no se hayan cumplido, no podremos dar clases en el centro de yoga.
Añadido a esto, es conveniente informarse de cuáles son los trámites exactos porque cada ayuntamiento y comunidad autónoma tiene normativas distintas.
Material y equipamiento para un centro de yoga
Con todo el plano legal en orden, va a ser necesario adquirir muebles y material de yoga para poder ofrecer un servicio de calidad.
Se debe prestar especial atención a la recepción, ya que es el primer sitio al que llegarán los clientes, y, por tanto, será la primera impresión que se van a llevar de nuestro negocio.
Lámparas, sillas, sillones, estanterías, percheros, taquillas... van a ser algunos ejemplos de mobiliario que necesitaremos.
Por supuesto el material de yoga que compremos debe ser de buena calidad y en cantidad suficiente para poder atender a la demanda del negocio.
Seguro de accidentes para clientes
Como ocurre en cualquier gimnasio o centro deportivo, es muy recomendable contar con un seguro de responsabilidad civil que se haga cargo cualquier problema que pueda surgir a un cliente dentro del centro de yoga.
El yoga es una actividad física en la que, por las posturas que se han de realizar, es probable que se puedan producir lesiones por un error del cliente.
Organizar los horarios de las clases de yoga
A la hora de organizar los horarios de nuestro centro de yoga deberemos tener en cuenta algunos aspectos:
- Los tipos de yoga que vamos a ofertar en el centro.
- Duración de las clases.
- Horas que prefieren tus clientes para asistir.
- Demanda de cada tipo de clases.
Si vamos a ofrecer yoga para niños, no va a tener sentido poner las clases en horario escolar, por ejemplo.
Si el grueso de clientes son personas que estudian o trabajan, seguramente vengan a las clases por la tarde una vez que han terminado.
Normalmente las clases de yoga duran entre 1 hora y 1 hora y media de clase.
Marcar la estrategia de marketing para el centro de yoga
Darse a conocer es importante, especialmente cuando el centro de yoga acaba de abrir sus puertas.
Sin embargo, lo óptimo es darse a conocer entre el público con capacidad potencial de terminar siendo nuestro cliente.
Por ejemplo, si la mayoría de posibles clientes son personas que utilizan bastante Internet, sería conveniente anunciarse en webs, blogs, redes sociales…
Si son personas que usan medios más tradicionales, lo adecuado es hacer publicidad en estos sitios, o a través de carteles en la calle, folletos en buzones...
Una táctica que funciona muy bien es la ofrecer 1 o 2 clases gratis para atraer más alumnos.
También hacer charlas y talleres gratuitos para que más gente conozca el negocio.
Vender material y productos de yoga
Además de ofrecer clases, una buena forma de expandir el negocio es vender material y productos relacionados con el yoga.
Contamos con la ventaja de que los alumnos verán los artículos cuando acudan a las clases, y será mucho más cómodo para ellos comprarlos allí mismo antes que tener que buscarlos en otros sitios.
Añadido a esto, también atraeremos a nuevos clientes al centro de yoga.
Es importante que las estanterías y muebles de venta estén a la vista para poder promocionar los artículos a la venta.
Con esto ya contamos con una pequeña guía para poder abrir nuestro centro de yoga propio, y así poder dedicarnos a lo que más nos gusta siendo, además, nuestros propios jefes o jefas.
